Mi libro de texto inalámbrico tiene 17,000 citas. Fue escrito con mi coautor a través de una enseñanza iterativa: borrador → enseñar → mejorar → repetir. Los estudiantes incluso se quejaron de que mis ejercicios eran demasiado difíciles, pasando más tiempo criticando el libro que respondiendo preguntas. Enseñar te obliga a entender los fundamentos. La investigación te da cosas nuevas para enseñar. Es una calle de doble sentido que fortalece a ambos.