Trump dice que impondrá un arancel del 100% a las películas hechas en el extranjero. Pero los aranceles solo se aplican a las importaciones. Si un estudio estadounidense filma una película en un país extranjero, no hay que gravar la importación. Para castigar a las empresas estadounidenses por filmar en el extranjero, necesitaría un nuevo impuesto, por lo que el Congreso tendría que aprobarlo.