A continuación se presenta una carta de amor que Alexander Hamilton escribió a su futura esposa hoy en la historia, 5 de octubre de 1780. "Te he dicho y te lo he dicho con sinceridad que te amo demasiado. Ocupas mis pensamientos de tal manera que no me permite pensar en nada más. No solo empleas mi mente todo el día, sino que también invades mi sueño. Te encuentro en cada sueño y cuando despierto no puedo cerrar los ojos de nuevo por estar rumiando tu dulzura. Es una historia bastante bonita, de hecho, que yo deba ser así monopolizado por una pequeña doncella morena como tú y de un soldado metamorfoseado en un amante insignificante. Creo en mi alma que eres una encantadora; pero he intentado en vano, si no romper, al menos debilitar el encanto y mantienes tu imperio a pesar de todos mis esfuerzos y después de cada nuevo intento que hago para liberarme de mi lealtad, mi corazón parcial aún regresa y se aferra a ti con un apego creciente. Para dejar de lado las cifras, mi hermosa niña, te vuelves más querida para mí en cada momento. Estoy cada vez más infeliz e impaciente bajo la dura necesidad que me mantiene alejado de ti, y sin embargo, la perspectiva se alarga a medida que avanzo. Harrison acaba de recibir un informe sobre la muerte de su padre y se verá obligado a ir a Virginia. Los asuntos de Meade (así como su amor) lo obligan a ir allí también en poco tiempo. Entonces quedarán muy pocos en la familia para hacer posible que yo la abandone hasta el regreso de Harrison, pero le he dicho que no me retrasaré más allá de noviembre." De Alexander Hamilton a Elizabeth Schuyler [Tappan, Nueva York, 5 de octubre de 1780]

Alex, tú perro.