Una de las herramientas más subestimadas en el trading es ser un maestro en distraerte a ti mismo. Lo he dicho antes y seguiré diciéndolo: la obsesión destruye el rendimiento. Un trader obsesionado se convierte en un trader dudoso, y un trader dudoso se convierte en uno perdedor. Necesitas dejar que la estrategia funcione. Necesitas dejar que la posición se mueva. Necesitas distraerte hasta que ocurra el resultado.