Hoy hemos llegado a un acuerdo histórico por el cual el Ministerio del Petróleo Federal recibirá el petróleo crudo producido en los campos ubicados en la región del Kurdistán, y lo exportará a través del oleoducto iraquí-turco. Esto garantiza una distribución justa de la riqueza, diversificación de las rutas de exportación y fomenta la inversión. Un logro que hemos esperado durante 18 años.